La lluvia de estrellas de las Leónidas es un fenómeno anual que se debe a los fragmentos que deja el paso del cometa Temple-Tuttle. Se trata de meteoros de color rojizo que atraviesan el cielo con cierta cadencia, dejando una estela verdosa tras ellos. Esto ocurre durante varios días del mes noviembre, siendo en este 2021 la noche del 18 de noviembre el momento donde se espera mayor concentración de estrellas fugaces surcando el cielo.
Así ocurre en la copa de Celeste, donde se han dado cita los elegantes aromas de arándanos maduros y las notas de café: seguro que también lo estás percibiendo. La lluvia de estrellas de las Leónidas, una de las mejores oportunidades anuales para pedir deseos, es un espectáculo que sucede próximo a la constelación de Leo, de la que toma su nombre.
Lugares con certificación Starlight
Si este acontecimiento te ha despertado la curiosidad de la observación astronómica, lo más recomendable es que escojas alguno de los lugares de nuestra geografía que cuente con el certificado expedido por la Fundación Starlight, reconocida por la UNESCO. Son zonas donde confluyen factores esenciales para la observación estelar: altitud e inexistencia de contaminación lumínica. La mayoría de ellos están alejados de las grandes urbes.
En Extremadura, el Parque Nacional de Monfragüe es uno de los más recomendables. Si lo escogemos como destino será divertido comprobar como su mirador se llama Celeste, como el vino que siempre nos acompaña en las observaciones estelares. En Cataluña es recomendable dirigirnos al norte, hacia el Pre-pirineo, concretamente goza de distinción Starlight la zona del Montsec, en las comarcas de la Noguera y el Pallars- Jussà, en la provincia de Lleida. También en esta misma provincia se recomienda el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici como punto ideal para escudriñar la bóveda celeste con nuestros prismáticos o telescopio.
En Aras de los Olmos, un pequeño pueblo del interior de Valencia se encuentra el Observatorio de la Universidad de Valencia, y es por ello que se ha convertido en un lugar de referencia para aficionados a la astronomía.
También son lugares interesantes, validados por la Fundación Starlight, la Comarca de Gúdar- Javalambre (Teruel), el Valle de los Pedroches (Córdoba), el Valle de Roncal en Navarra y por supuesto, las Islas Canarias, que son uno de los mejores lugares para la observación astronómica, no solo de España, también de toda Europa.
Viñedo en altura
Nuestra copa de vino nos recuerda que también desde su lugar de origen: el viñedo de Pago del Cielo, en Fompedraza (Valladolid) se divisa con claridad la bóveda celeste. Una llanura situada a casi 900 metros sobre el nivel del mar donde las sabias cepas de tempranillo resisten los fríos inviernos y renacen con la primavera para entregar sus uvas en la vendimia. Este vino nos transmite con su frescura una emoción similar a la de ir descubriendo puntos luminosos en el firmamento.
Disfrutando de Celeste Crianza, nuestro vino con DO Ribera del Duero fetiche para la observación astronómica, nos volveremos a sentir pequeños en la inmensidad del espacio, pero también afortunados de estar disfrutando (con salud) de un gran vino.
