Hotel Boutique en Mallorca, Islas Baleares, España
Cap Rocat en Mallorca es una antigua fortaleza militar. Una finca declarada por la UNESCO como Bien de Interés Cultural y situada en 88 acres de terreno privado y 2 km de costa. Un lugar privilegiado como puedes imaginarte. Lo había visto en el pasado, cuando era una fortaleza, y al regresar y verlo convertido en hotel de lujo fue toda una sorpresa.
Por Glòria Vallès
Este hotel boutique que había sido fortaleza militar –parece un contrasentido, ¿no?- se mimetiza con el entorno, en una zona declarada Área Natural de Especial Interés que le rodeaen Mallorca. Toda la labor de recuperación les ha valido el premio Europa Nostra 2017 a la Consevación del Patrimonio, un motivo suficiente para que consideremos este lugar un hotel sostenible en cuanto a su vinculación con el patrimonio y la preservación de la cultura local.
Decimos que es un hotel boutique por sus 28 habitaciones y porque es un remanso de tranquilidad y paz, pero el lugar es majestuoso, casi sagrado. Cuando entres no tendrás la sensación de estar en un hotel pequeño. Así mismo, a pesar de estar ubicado a tan solo diez minutos de Palma de Mallorca, la capital, y con una mirada privilegiada a la Bahía de Palma, cuando estás dentro no tienes la sensación de estar tan cerca de la ciudad.
LAS VISTAS PANORÁMICAS DESDE SU RESTAURANTE SEA CLUB SON ESPECTACULARES, Y SI HAS TENIDO EL PRIVILEGIO DE LLEGAR EN BARCO A SU EMBARCADERO PRIVADO, LA SENSACIÓN ES TODAVÍA MEJOR.
El hotel es el mejor refugio de lujo para disfrutar de unas vacaciones únicas con todas las comodidades. Las vistas panorámicas desde su restaurante Sea Club son espectaculares, y si has tenido el privilegio de llegar en barco a su embarcadero privado, la sensación es todavía mejor. El personal, vestido con uniforme de hilo y con el máximo protocolo de atención.
Una tarde en la piscina infinity de agua salada encima de lo que había sido la antigua muralla de la fortaleza de Cap Rocat, combinada con un tratamiento spa o una sesión de yoga, es la experiencia perfecta para un fin de semana romántico.
Lo mejor del hotel Cap Rocat
Lo mejor de este hotel: la restauración que ha llevado a cabo el propietario Antonio Obrador de la antigua fortaleza, respetando la riqueza del patrimonio y del entorno. La experiencia que no cambiaría por ninguna otra: una cata de vinos y una cena en las antiguas cocinas de la fortaleza. Sírvete un vino de Mallorca (un Galdent de Ca’n Majoral, Tianna Bochooris de Tianna Negre o un Sio 300 de Bodega Ribas son buenas opciones) y disfruta de las vistas desde la antigua torre de vigilancia donde está la bodega.
El “Sea Club”, situado al borde de la Cala de la Reina, es una de las coordenadas gastronómicas de Cap Rocat, un informal bistró al aire libre. El Restaurante de la Fortaleza, ubicado en uno de los pabellones centrales donde solían comer los soldados y con el chef mallorquín Víctor García al frente de los fogones. Ofrecen show-cooking y clases de cocina.
Si quieres conocer otro hotel espectacular con vistas al mar que te dejan sin respiración, este en Ibiza es una muy biena opción.
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