Los sonidos del viñedo estarán presentes en la edición 2019 del Sónar+D, un congreso dedicado a la creatividad y la innovación en el entorno digital. Esta cita, que se celebra del 17 al 20 de julio en Barcelona, es un punto de inspiración y networking clave para el sector audiovisual, musical y creativo en distintas disciplinas.
Por Esther Ibañez
Vinophonics estará presente en el AudioTechHub del SonarHub, un espacio expositivo donde se dan a conocer ideas, herramientas y contenidos a disposición de creadores y comercializadores.
Sorprende cómo uno de los eventos tecnológicos más punteros vuelve su mirada hacia la naturaleza como fuente de inspiración.
Business at Sónar+D
Pero ¿qué es exactamente Vinophonics?
En síntesis, se trata de un instrumento musical capaz de interpretar los datos recogidos en un viñedo y en el blockchain.
Nos situamos en el viñedo de Costaflores, en Mendoza (Argentina). A través de distintos sensores instalados en el campo se recopilan series de datos relevantes para la viticultura: tales como la precipitación, las horas de insolación o la temperatura.
Son datos que definen un determinado viñedo. Esta información suele presentarse en gráficos y tablas, desde hace poco también se registran en el blockchain.
Mike T. Barrow, propietario de la bodega Costaflores afirma “Con estos datos queremos llegar a una autocertificación orgánica de nuestro viñedo: los datos que obtenemos son públicos y se vuelcan en blockchain, con lo cual ya nadie tiene poder de modificarlos, ni nosotros mismos”
Pero, ¿hay más modos de representar los datos obtenidos? Sí, estos datos pueden convertirse en notas musicales a través de un sintetizador llamado Antonus 2600 diseñado por el ingeniero electrónico Toni Gutiérrez basándose en el mítico Arp 2600 de los años 70.
En esto consiste Vinophonics, en emisiones musicales creadas a partir de los datos climatológicos de un viñedo que podrán escucharse vía streaming en cualquier parte del mundo.
Así, la sinfonía de un viñedo mendocino se escuchará en el Sónar de Barcelona y próximamente en otras ciudades de todo el globo, desde Montevideo a Osaka.
“Vinophonics busca encontrar nexos entre el mundo físico, sonoro y digital, es un proyecto inspirador y creativo en torno al vino”- resume Barrow.
¿Y cómo suena el viñedo de Costaflores? Así:
Vinophonics – Costaflores Organic Vineyard
Costaflores no es una bodega convencional por muchas razones. Elabora MTB (Mike Tango Bravo), un vino orgánico a partir de tres variedades: Malbec, Petit Verdot y Cabernet Sauvignon.
LA BODEGA COSTAFLORES TAMBIÉN ES PIONERA EN CREAR UNA CRIPTOMONEDA RESPALDADA EN EL VINO : UN TOKEN QUE EQUIVALE A UNA BOTELLA
Y hasta aquí lo habitual. Y desde aquí lo sorprendente: se trata de la primera bodega OpenSource, es decir, toda su actividad es pública, todos sus datos de producción, costes, etc. están a disposición de cualquiera en internet.
Costaflores también es pionera en crear una criptomoneda respaldada en vino: un token que equivale a una botella. Cada año se lanza una oferta de criptomonedas basándose en la producción obtenida en la vendimia.
Una vez pasado el tiempo establecido de compra-venta y después de que el vino haya finalizado su crianza en barrica, el poseedor de la criptomoneda puede redimirla por una botella.
El precio de cada botella de MTB se establece en el mercado de la criptomoneda con las fluctuaciones de oferta y demanda que lo caracterizan.
En este vídeo lo explican de un modo muy gráfico :
Openvino and the MTB18 Wine Cryptoasset!
“El vino es la mejor metáfora para entender el funcionamiento de las criptomonedas”- apunta Mike T. Barrow. En este caso la innovación alcanza el mundo de la viticultura y el vino, sectores frecuentemente definidos por la tradición.
Si quieres conocer otras innovaciones en el sector del vino en España no te pierdas el post ¿Existe el I+D en las bodegas españolas?
FOTOGRAFÍA : @ Vinophonics – Costaflores